No importa la época del año, probablemente haya algo que lo mantenga ocupado en su jardín. Ya sea rastrillando en otoño, preparando plantas para el invierno, plantando en primavera o desmalezando en verano, tener un jardín puede mantenerte ocupado. La jardinería es un gran ejercicio, pero también puede ser duro para el cuerpo. Siga leyendo para conocer nuestros consejos para mantenerse saludable mientras trabaja en el jardín:
- Cambiar de posición con frecuencia. Trate de evitar agacharse durante un período prolongado de tiempo y asegúrese de cambiar de lado con frecuencia. Si siempre arrancas las malas hierbas con el brazo derecho, intenta arrancar algunas con el izquierdo. Cuando te encuentres constantemente arrodillado sobre tu rodilla izquierda, asegúrate de girar la rodilla derecha. Mantener la misma posición durante períodos prolongados puede resultar estresante para el cuerpo, así que tómate descansos de vez en cuando para ayudarte.
- recuerda estirar. Además de cambiar de posición con frecuencia, asegúrese de estirarse con frecuencia. Si has estado mirando al suelo durante un tiempo, estírate en dirección opuesta mirando hacia el cielo. O si llevas un tiempo encorvado, levántate e inclínate hacia atrás para mover la espalda en la dirección opuesta. Estos sencillos trucos pueden ser de gran ayuda para prevenir el dolor.
- Utilice ayudas como carretillas o mangueras.. Sostener un grupo de ramas o una regadera grande puede parecer fácil al principio, pero una vez que caminas por todo el jardín, estas cargas pueden volverse pesadas. Utilice carretillas para transportar cargas grandes y mangueras para regar las plantas que no estén cerca para aliviar sus porros.
- Protege tus rodillas. Si se arrodilla con frecuencia, considere agregar una almohadilla para arrodillarse. Tus rodillas te agradecerán que las salves del duro suelo. Si esto aún no es suficiente, considere agregar camas elevadas a su jardín.
- empezar lentamente. Una cantidad abrumadora de lesiones ocurre en personas que hacen demasiado y demasiado pronto. Si ha pasado un tiempo desde que saliste a rastrillar o cortar ramas, no lo hagas todo de una vez. Comience lentamente dividiendo las tareas a lo largo del día o incluso distribuyéndolas durante varios días. Estarás feliz de haber disminuido el ritmo si puedes prevenir lesiones y seguir así, en lugar de lastimarte por exagerar las cosas y obligarte a tomar un descanso.
Si le duele el hombro por arrancar la maleza, le pone nervioso arrodillarse para plantar bulbos o tiene otra inquietud sobre la jardinería, nuestro equipo en MOTION podrá ayudarlo a regresar de manera segura a disfrutar del aire libre.